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Muchas especies de la Tierra están en peligro.
Desde los tigres y las ballenas hasta los insectos y las plantas que mantienen ecosistemas enteros.
Si queremos evitar que desaparezcan para siempre, debemos actuar deprisa.
Conservación
Conservación quiere decir evitar que se pierdan organismos y hábitats.
Hay varias estrategias, pero todas se enfrentan a retos complicados.
Cría en cautividad
A veces se emplea la cría en cautividad cuando el número de animales desciende peligrosamente.
Pero no siempre es factible, y los animales criados en cautividad a menudo no logran sobrevivir en la naturaleza.
Bancos de ADN
Actualmente se están creando bancos de semillas y de ADN animal, unas bibliotecas vivas para evitar las extinciones.
Pero esto supone congelar las células para producir organismos probeta.
Es el último recurso de la conservación.
Protección
La mejor estrategia es comenzar por evitar la pérdida de especies por la caza excesiva y la destrucción del hábitat.
En muchas zonas la caza furtiva se controla con armas, como aquí, en la cuenca del Congo.
Y el cercado de los parques protegidos ha ayudado a conservar los hábitats.
Pero cuando la población local necesita los recursos para vivir, puede ser complicado.
En los años 90 se cercaron extensas áreas de Kenia que patrullaban guardas armados.
Esto salvó a los elefantes y rinocerontes, pero obligó a los masai a abandonar su tierra.
Las estrategias de conservación deben incluir a las poblaciones locales para que funcionen a largo plazo.
Moises Leon, Tropical Science Center - «si tuvieras que decidir entre un árbol en pie o dar de comer a tus hijos... ¿qué harías?»
Nisar Malik, Conservacionista - «Los de fuera no podemos imponer algo a una persona de un entorno en el que tiene que convivir con la vida y la muerte a diario».
Los retos para la conservación serán cada vez mayores.
Pero si no actuamos, la destrucción de los ecosistemas de la Tierra nos afectará a todos.